lunes, 5 de diciembre de 2011

Miraflorina. No subas

Se acabo, todo fue en vano. No escuchaste mis ruegos, me humille ante ti. Cambie. Para mal. No por ti, pensamiento cruel, lo hice por mi. Ahora llevo la careta que bien te encargaste de moldear, jugaste con fuego e intentaste no quemarte, que lastima pues sucedio. ¿Ahora huyes? Te crei más fuerte, me equivoqué. Son las 9 de la noche y aun estoy aquí, sentado debajo de las escaleras del aeropuerto esperando que te hallas arrepentido. Pero no. No lo hiciste, y ¿de que te vas a arrepentir? si todo esto lo planificaste desde un comienzo. Fui parte de tu juego.





¿Quieres matarme por lo que voy a escribir? No te preocupes, almenos yo no recuerdo tan bien como tu lo que nos paso.

Sin embargo me pedias insistentemente que te cuente mi versión.




Me tire al sofa, estabamos muy cansados, ¿me porte como un idiota? disculpa. Mis sentimientos se encontraban reprimidos por aquello que nosotros llamamos embriaguez. ¡Valla cosas las que pense en ese momento! pero quedaron asi como un pensamiento: dulce como tu perfume, inconcluso como nuestro... ¿Amor?  No lo creo, lo nuestro es más salvaje, menos masoquista pero igual de tormentoso.

Entonces heme allí recostado mirando al techo mientras tu, aun en la mesa, haciendo sabe dios que. No hablamos por un buen rato, quiza entonces tu jurabas que yo estaba dormido. ¿Dormido yo? Solo esperaba el momento adecuado para arrancarte... ¿Un beso? Dejemoslo asi.


Dejemoslo asi dijiste, en lugar de prometer que volverías. ¡Lo que dejado todo por ti! -dijiste. Pero aun no acabo de entender a que te refieres con todo. Si en estos 3 meses que han pasado no tenias a nadie, solo a mí. ¿En donde quedo el viaje que hariamos a Barcelona? ¿En donde quedaron los besos, las caricias, las noches?

Supongo que te estoy haciendo sentir culpable de mis flaquezas, lo siento, lo siento porque lejos de hacerte sentir culpable quiero que seas miserable. Esto es lo que has creado con tanto esmero. Felicitaciones!.

¿Que estoy haciendo? Esto no deberia estar pasando, todo este pesar esta acabando conmigo, quiero que se acabe. ¡Basta ya! estoy al borde de la locura, todo empieza a dar muchas vueltas, quiero llorar pero nunca lo he hecho y no voy a comenzar ahora. Quiero gritar, necesito ayuda, necesito volver a casa, necesito terminar con todo. Necesito acabar contigo pero ya no puedo, debo acabar con todo lo que me haga recordarte. Ahora en el baño lo unico que puedo reflejar en el espejo es tu vil mirada en mí. Soy tu mejor retrato, pero claro! si tu me moldeaste a tu gusto. Adivina que, acabaré con esto de una buena vez, mis manos empiezan a sangrar por los vidrios rotos del espejo. No he entrado en desesperación, aún no. Al contrario, siento ganas de seguir acabando contigo, conmigo. Todos me estan mirando. Malditos! no saben que está ocurriendo. Debo encontrar la manera, los guardias me vienen siguiendo, dejenme en paz! Un charco de sangre marca mi rumbo, estoy perdido, no podré acabar. Me encuentro acorralado de guardias. Me apuntan. Debo acabar con esta nota de voz, me piden que baje todo lo que tengo en la mano. Tu sucia mirada no se me quita de los ojos, la reflejo muy claro en la mampara, todo gira, no puedo moverme, solo estoy concentrado en la baranda, en la dura caida, mis ojos estan rojos, todo yo estoy temblando del pánico. Empiezo a correr hacia la baranda para acabar contigo de una vez. Fin de la nota, Adiós y hasta nunca "Miraflorina".



-Tildes omitidas-

2 comentarios:

  1. Un texto con mucha fuerza. Me gusta.

    Lo único que no me acaba es que el 90% de los acentos están omitidos. Si por lo menos los omitieras todos... ;)

    Un saludo.

    ResponderEliminar
  2. Muy buena!!
    me gusto mucho =)

    ResponderEliminar